El Oso Ocioso es un tipo muy particular de oso, como vemos en esta curiosa y tierna foto.
En efecto, el tipo Ocioso es un particular úrsido que se caracteriza por hacer del ocio, el descanso y el dolce far niente una ideología y una filosofía de vida de oso.
Cuando muchos osos deciden ir a cazar,
el oso ocioso suele buscar cualquier excusa para no ir, siendo la más preferida simplemente dormirse para ni siquiera tener que dar explicaciones con sus típicos gruñidos, siendo muy común que
osos dormilones y osos ociosos compartan ejemplares, tanto en las especies de osos pardos como en las de los polares e incluso de los pandas.
La época preferida del oso ocioso es el invierno, ya que es cuando hiberna y se siente mejor, disfrutando de la cálida osidad y el discreto encanto del ocio del semisopor bajo el que queda en espera de las temporadas de deshielo.
En las fotos familiares, siempre es fácil reconocer cuál es un oso ocioso, porque su predilección por evitar esfuerzos que considera innecesarios lo lleva a no tomarse el trabajo de disimular su condición de ocioso, por lo que queda en evidencia, como vemos.
En ocasiones, la osa enamorada de un oso ocioso le recrimina su falta de interés por cosas que no sean abrazarse y dormir, pero lo cierto es que también hay osas muy ociosas, que cuando encuentran al oso de su vida forman familias en las que esta condición se perpetúa entre los ositos hijos. En ese caso, se forman familias osas ociosas.
Este tierno Osto Dormilón no tiene nada que envidiar al otro Osito Dormilón que hemos presentado hace un tiempo, pues es también muy amoroso y lindo, y también muy simpático.
